Sólo faltan 3 semanas para el pistoletazo de salida del Maratón de Atenas, estás entrenando a tope, ya has competido en varias carreras, está casi todo a punto, no lo estropeemos ahora.
En estos momentos ya está casi todo el trabajo hecho. Sólo queda una semana de trabajo intenso con varias sesiones y una tirada larga, metiendo ritmo de maratón durante un periodo controlado. Al menos así lo estamos entrenando nosotros.
Cuando acabe esa tirada larga este domingo, toca empezar a bajar la intensidad y la cantidad de kilómetros en el entrenamiento. Es el periodo en el que se trata de asimilar todo el trabajo realizado hasta ahora. No hay que empeñarse en apurar más días de lo necesario. Lo que no se haya trabajado ya no va a ser de gran ayuda para el resultado final de tu estado forma bajo el arco de salida. Se trata de que el cuerpo se recupere lo máximo posible de todos los maltratos a los que le hemos sometido estos últimos meses. Hay que seguir entrenando para mantener activo el cuerpo, para afinar al máximo los esfuerzos realizados, pero sin castigarle más de lo necesario. Lejos de perder la forma que hemos alcanzado, vamos a conseguir poner nuestros músculos lo más relajados que sea posible a la vez que siguen activos.
Es ahora cuando podemos hacer una estimación de cuál puede ser nuestro objetivo real en la carrera pues es ahora cuando sabemos lo que podemos dar de sí. Como seguramente habrás competido en alguna medio maratón y en varios 10k, puedes utilizar alguna de las calculadoras de ritmos de carrera que hay por internet para predecir cuál debería ser tu ritmo objetivo y establecer un plan desde un punto de vista realista. En estas calculadoras te piden que rellenes tu última marca en alguna distancia distinta al maratón y harán una estimación de qué ritmo puedes llevar en carrera y que te permita conseguir tu mejor marca objetiva.
Nosotros conocemos la calculadora McMillan en la que te ofrece un tiempo objetivo final con un ritmo medio.
También hay una, llamada feelRace, en la que no sólo te dan un estimación de tiempo, además te ofrecen un plan de carrera en base a tus pulsaciones máximas y tu último tiempo en medio maratón o 10k. Te planifican cuáles deben ser tus ritmos desde el inicio de carrera y cómo debes ir incrementándolos en base a tus pulsaciones y el número de kilómetros recorridos.
No defendemos que haya que seguir al pie de la letra lo que pronostican estas calculadoras, pero al menos te pueden servir como guía para saber si la marca que tienes pensada es realista. Eso sí, hay que tener en cuanta que la Maratón de Atenas tiene un perfil en la zona central de la carrera que te obligará a recalcular todos los ritmos estimados para adaptarlos a la dureza de algunas de las subidas.
Si hay algo más duro que acabar un maratón, es entrenarlo.